Porciones: 4
INGREDIENTES
2 atados de espinaca
50 gramos de mantequilla
4 yemas
100 gramos de queso rallado
½ taza de crema de leche (nata)
Sal y pimienta, nuez moscada
4 claras
1 cucharada de azúcar
PREPARACIÓN
Las dos espinaca
Lavar las hojas de espinaca y ponerlas en una cacerola con 1 cucharadita de azúcar (para que las hojas mantengan el color verde). Llevar al fuego con la cacerola destapada y dejarlas hasta que las hojas se marchiten. Retirar, escurrir bien y dejar enfriar. Exprimirlas y picarlas.
Salsa blanca
Derretir en una cacerola la mantequilla. Agregar la espinaca y rehogarlas un poco. Aparte, en un recipiente poner las yemas, la crema de leche y el queso rallado. Condimentar al gusto con sal y pimienta y nuez moscada Agregar la espinaca mezclando bien.
Batir las claras
Batir las claras con el azúcar hasta que estén a punto nieve. Incorporar la mitad de las claras a la preparación anterior. Mezclar hasta incorporara las claras batidas a la preparación. La mitad restante, incorporar en forma lenta y envolvente para no bajar el batido.
Cocción del soufflé
Se enmanteca y se espolvorea con pan rallado una budinera para flan. Volcar la preparación en él, cocinar en horno precalentado bien caliente 200º, hasta que el soufflé haya aumentado, esté dorado y se hay formado una cáscara arriba. Se sirve enseguida y en el mismo molde. Porque se mantiene el tamaño durante 3 minutos,después baja y queda de mal aspecto.