Las ensaladas tienen su aderezo clásico que es el más conocido y también el más utilizado, es el llamado aderezo francés o salsa francesa que consiste en aceite, vinagre o limón, sal y pimienta. También se conoce como vinagreta.
Pero más allá del gusto personal de cada uno, nos gustaría darles una idea sobre el tipo de aderezo que se adapta a cada una proporcionándole un mejor sabor.
Por ejemplo, las distintas variedades de lechuga resaltan mejor su sabor con una mezcla de aceite, vinagre y sal muy suave. Se debe aderezar en el momento de ser servida para evitar que se marchite. Pero también queda muy bien con una mezcla de crema de leche, limón, sal y pimienta. Y si a ésta le agregamos unos trocitos de queso fresco más rica todavía. Además de sabrosa se convierte en una ensalada de más aportes vitamínicos.
A la escarola le va muy bien el aderezo francés mezclado con huevo duro bien pisado y podemos perfumarla colocando en el fondo de la ensaladera una tostada frotada con ajo.
Los berros deben aderezarse en el momento de servirse con el aderezo francés o solamente con jugo de limón que no le altera su sabor original.
Las verduras de hojas más amargas requieren un aderezo más intenso por su sabor y permite combinarlas con una verdura dulzona o con una fruta.
Aderezo francés para 4 porciones
2 cucharadas de vinagre o limón o mitad y mitad
4 cucharadas de aceite
¼ de cdita de sal
Pizca de pimienta o 2 o 3 vueltas al molinillo
un puñado de hierbas frescas picadas. Optativo
Debemos tener presente que una ensalada debe ser condimentada con lo necesario sin abusar para que el aderezo se adhiera a las hojas sin que sobre en el fondo de la ensaladera. Lo correcto es que todos los elemento que componen una ensalada deban untarse con él pero no en exceso.
Otro detalle es mezclar bien todo en el momento de servir teniendo la precaución de mezclar primero la sal con el aceite y luego agregar los demás ingredientes.
Esto se hace para que la sal se integre y no quede separada. Otro elemento valioso para condimentar es el yogur natural que además de su rico sabor le da frescura a la ensalada realzando los sabores naturales.
Esto mismo sucede con la mayonesa que la podemos usar rebajada con yogur o crema de leche o jugo de limón que le da un toque festivo y rico además de resulta tentadora para todos.
La salsa de soja, la salsa ketchup, la mostaza etc… son todos condimentos válidos de incorporar a una ensalada si éstos son acorde a nuestro gusto.
El jengibre es un condimento estimulante del organismo con sabor alimonado y se le da el mismo uso que la pimienta.
Poca cantidad porque es invasivo.
La salsa de soja es un condimento excelente además de nutritivo, su sabor se asemeja al extracto de carne.
Su consumo no debe ser exagerado utilizándolo hasta tres veces por semana como complemento está bien.
Las semillas de sésamo es un alimento que se usa como condimento de las comidas. Pueden ser perfectamente incorporadas por lo tanto a las ensaladas pero utilizándose siempre en pequeñas cantidades. Es una fuente de vitaminas, calcio y fósforo. Se pueden comer crudas o tostándolas un poco.
El germen de trigo es un complemento alimenticio excepcional. Es una fuente importantísima de vitamina E, A y el complejo B. Se utiliza tanto en comidas cocidas como crudas.