Nuevos ñoquis de zanahoria

Porciones: 4

INGREDIENTES
1 kg de zanahorias
1 taza de almidón de maíz
2 tazas de harina 000 o la que puedas conseguir (240 gramos)
Sal, pimienta al gusto
3 huevos
100 gramos de queso rallado
2 tazas de caldo de verdura (o leche, o agua, o leche de soja)
Especias a gusto, nosotros utilizamos
1 cucharadita de condimento verde
2 cucharadas de cebolla en escamas
1 cucharadita de coriandro
1 cucharada de salsa de soja

PREPARACIÓN
Lavar las zanahorias, rasparlas y cortarlas a la mitad.
Ponerlas en una cacerola y cubrirlas con agua hirviendo.
Tapar la cacerola y cocinarlas hasta que estén tiernas.

Esto es importante ya que así las zanahorias se cocinan bien y su color permanece.

Una vez prontas escurrir bien y pisar en caliente haciendo un puré.
Reservar.

En otro recipiente, poner el almidón de maíz, la harina, condimentos y especias elegidas y el queso rallado.

Poner en el vaso de la licuadora, la mitad de los ingredientes en forma alternada, agregándole 1 taza de caldo.
Mezclar y licuar hasta que los ingredientes se incorporen.
Retirar esta preparación de la licuadora y hacer lo mismo con la otra mitad de los ingredientes.

Una vez licuadas las dos preparaciones, se mezclan bien.
Tapar el recipiente y llevar al refrigerador durante unas horas o de un día para otro.

Esto se hace para que la mezcla se hidrate bien con las harinas y al cocinar los ñoquis se logra una masa liviana y delicada.

Cocción de los ñoquis. Poner abundante agua en una cacerola con sal gruesa al gusto.
Agregar 1 hoja de laurel, tapar la cacerola y llevar al fuego.

Cuando empieza a hervir, destapar la cacerola y empezar a cocinar los ñoquis.
Tomar una porción con una cuchara de postre, sumergir la cuchara en el agua hirviendo y sola se desprende la masa.

Los puedes hacer del tamaño que quieras.
Una vez que suben a la superficie están prontos y se retiran con una espumadera.

Se pueden servir con una salsa pero al ser tan gustosos, simplemente con aceite y queso rallado quedan muy bien.

Si te sobra masa y los quieres preparar para el otro día, la guardas en la heladera y la puedes cocinar al día siguiente, sin esperar nada.
De la heladera al agua hirviendo directo.