Cada rodaja de papa representa una tentación igual, tanto para grandes como para chicos. Y si bien son fritas, que no es lo más aconsejable y su ingesta representan muchas calorías, de vez en cuando nos podemos premiar haciéndolas caseras que por supuestos serán mejores que las compradas.
Porciones: 6
INGREDIENTES
1kg de papas medianas
Agua bien helada
Aceite de buena calidad
Sal
PREPARACIÓN
Lavar y pelar las papas.
Para cortarlas se emplea el disco del procesador, que está diseñado para cortar láminas bien finas, casi transparente.
De no tener el procesador y contar con un poco de paciencia se puede cortar con un rallador que tenga en el medio un cortador de papas.
Una vez cortadas sumergirlas en abundante agua helada (con muchos cubos de hielo) y mantenerlas en la heladera una hora.
Calentar abundante aceite preferentemente en una cacerola.
Escurrir la cantidad de papas que se van a cocinar en esa primera etapa.
Una vez escurridas secarlas bien con un paño seco.
Volcarlas de golpe en el aceite y con ayuda de un tenedor ir separándolas para que se doren parejas.
Darlas vuelta continuamente con la ayuda de un tenedor y a medida que se doren se retiran con una espumadera y se acomodan sobre papel absorbente.
Se hacen rápido.
Repetir hasta terminar y cuando están frías salarlas a gusto y guardarlas en frascos bien secos y cerrados herméticamente.