Porciones: 8
INGREDIENTES
Masa
2 y ½ tazas de harina (300gramos)
1 cucharadita de polvo de hornear
Pizca de sal
130gramos de manteca fría (mantequilla) o manteca vegetal
3 cucharadas de coñac (o agua, o leche, o licor)
Relleno
2 tazas de pulpa de zapallo cocido (auyama) o calabaza
150gramos de ricota cremosa
2 manzanas (de cáscara verde) (grand smith)
50gramos de pasas de uva
½ taza de azúcar (100gramos)
2 cucharadas de almidón de maíz (fécula, chuño)
1 huevo
2 claras
Ralladura de medio limón
2 cucharadas de coñac (ron, licor etc)
Canela a gusto
PREPARACIÓN
Masa. Cernir la harina, el polvo de hornear y la sal.
Poner los ingredientes secos en el vaso del procesador junto con el azúcar, la mantequilla cortada en cubos y el coñac.
Procesar unos segundos hasta que esté unido todo.
Llevar el vaso a la heladera y dejarlo un rato hasta que la masa esté fría y firme.
Retirar y volcar sobre la mesa.
Terminar de armar la masa rápidamente ayudándose (si es necesario), con un poco de harina.
Formar un bollo, envolver en papel film y volver a dejar en la heladera hasta el momento de utilizar.
Relleno. Lavar y pelar las manzanas.
Cortar en cubos y colocar en una cacerola chica junto con la media taza de azúcar y las pasas de uva.
Tapar la cacerola y llevar a fuego medio mezclando cada tanto hasta que las manzanas estén bien tiernas.
Retirar, mezclar todo bien e incorporarlas al puré de zapallo.
Procesar la ricota junto con la yema y claras y agregársela a la preparación anterior.
Incorporar el almidón de maíz, la ralladura de limón, el coñac y canela a gusto.
Reservar en la heladera mientras se estira la masa.
Masa. Estirar las tres cuartas parte de la masa hasta que quede fina.
Forrar una tartera desmontable y rellenar la tarta con la preparación anterior.
Estirar el resto de la masa y cubrir la superficie del pastel.
Hacer unos cortes en forma decorativa para que el vapor salga durante la cocción.
Se puede pintar con huevo batido.
Cocinar en horno moderado 180º durante 35 o 40 minutos o hasta que esté cocida y dorada.
Retirar y dejar enfriar un poco antes de desmoldar.
Se puede servir tanto tibia como fría.